Dolor emocional – cómo acompañarlo para transitar mejor por él

El dolor emocional suele ser un visitante no deseado en la terapia emocional. A nadie le gusta sentir esta sensación opresiva en el pecho, seca o acompañada de lágrimas. Por eso, intentamos evitarla por todos medios. Sin embargo, de nuestra capacidad de sostenerlo dependerá la sanación de lo que nos duele. En este vídeo y artículo te explico como acompañar el dolor emocional para transitar mejor por él. 

El dolor emocional puede ser reciente que puede aparecer después de una ruptura de pareja o un dolor emocional más antiguo, cuando tenemos heridas emocionales, p.ej. herida de desvalorización o cualquier otra herida que viene de un dolor antiguo del pasado.


El dolor duele

Voy a decir algo obvio: el dolor duele. Este es “problema”, porque no queremos sentir lo desagradable y queremos escapar de ello. No querer sufrir es algo humano, todos lo experimentamos. A la vez podemos aprender a estar con él porque necesita ser tocado con amabilidad, con nuestra presencia y acogimiento para poder ser sanado. 


Cambio de actitud para acompañar el dolor emocional

Te comparto hoy una manera de cambiar y empezar a estar con el dolor y acompañarlo que utilizo como terapeuta emocional. Normalmente cuando nos duele queremos que mejore y desaparezca. Esta es la actitud que tenemos que abandonar. Vamos a estar con el dolor porque estamos mal, NO para estar mejor. La diferencia es sutil. Estoy con lo que duele porque me duele, y no para salir de allí. 

Este cambio de actitud te sitúa en el presente y no en un futuro donde aspiro a un bienestar por llegar. Llegaré allí pero mi mente no está enfocada en esto. Mi mente está enfocada en lo que me pasa en el presente: que me duele. 

Incluso puedes poner tu mano donde sientes la sensación de dolor, respirar allí unos instantes y decir: “Estoy aquí. Aunque esto sea difícil de sentir, estoy aquí”. 


El dolor se cura con el amor

Cuando quieres salir del dolor y te dices a ti mismo: “¡Qué mejore, qué mejore!” te conectas con la lucha. La lucha crea resistencia y aún más dolor. Aplicando la actitud de acompañar el dolor, te conectas con la compasión. Y la compasión te lleva al amor. Y el dolor se cura con amor, lo necesitamos para poder sanar. 

El dolor emocional se diluye rápidamente dentro del amor.

 

Si tienes alguna pregunta o comentario, ¡compártelo abajo! Si tienes algún dolor por él que te cuesta transitar, te invito a la primera sesión gratuita de terapia emocional



Escrito por Asia Drozd

Terapia emocional en Barcelona y online
Terapia Gestalt individual y de pareja
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Deja un comentario