Hoy vamos a practicar la respiración oceánica que es un buen tratamiento para la ansiedad. Te ayudará a calmar la ansiedad y generar la sensación de vibrante paz.
Su nombre viene del sonido que se produce al respirar que vamos escuchando durante la meditación. Nos recuerda el sonido del mar que es muy relajante.
Esta meditación para la ansiedad activa el nervio vago que es el que conecta literalmente el cerebro con el cuerpo y es el responsable de la respuesta de relajación. Te puede ayudar cuando tienes una crisis de ansiedad y quieres calmarte. También cuando tienes tantos pensamientos que crees que te vas a volver loco ya que ayuda a concentrarte.
Influye por lo tanto en la regulación y la consciencia emocional. Rebaja la respuesta de estrés activando el sistema nervioso parasimpático.
¡Allí vamos! Sigue leyendo o escucha el vídeo.
Antes de empezar esta meditación puedes hacer algunos estiramientos o un poco de yoga para mover un poco la energía en tu cuerpo y conectar con él. Luego siéntate cómodo y cierra los ojos.
Durante toda la práctica de esta meditación para la ansiedad trata respirar con el diafragma. Está más que demostrado que la respiración diafragmática ayuda a combatir el estrés y la ansiedad.
1. Primero respira de forma natural por la nariz unos instantes y empieza a observar la respiración, contemplando su ritmo y su profundidad…
2. Empezamos la respiración oceánica: Empieza a inhalar por la nariz y exhalar por la boca. Es como si quisieras empañar a un cristal cuando exhalas. Procura que la exhalación sea profunda y larga, hasta que te quedes completamente sin aire…
3. Escucha el sonido de tu respiración. ¿No te recuerda al sonido de las olas del océano? Continua durante un mínimo de 3 minutos.
4. En las últimas respiraciones imagina que al exhalar vas a soltar todas las tensiones… primero físicas… luego emocionales… y también las mentales…
5. Vuelve a tu respiración natural por la nariz.
Date cuenta… ¿Cómo es tu respiración ahora? ¿Qué ha cambiado? ¿Cómo te sientes?
Puedes abrir lentamente abre los ojos.
Esta meditación la utilizo a veces en la terapia para la ansiedad, puedes hacerla en cualquier momento del día pero sobre todo cuando notas que la ansiedad empieza a apretarte. También te puede ir muy bien si quieres enfocarte mentalmente.
Espero que compartas conmigo tus experiencias en los comentarios abajo. Si te ha servido esta meditación para la ansiedad, compártela con tus amigos.